Una excursión morrocotuda. De Arsen

El sábado 11 de noviembre, me fui a hacer una excursión a la ermita de Remolinos.

Cuando mi abuelo llegó a mi casa, aun no había amanecido porque eran las seis de la mañana. Salimos de Santa Engracia y lo primero,  fuimos  hasta el acueducto de las Trabas, que ya es sitio conocido por anteriores excursiones. De momento todo iba bien hasta que llegamos al molino del Sindicato. Me paré porque me dolían los pies y no podía seguir,  así que mi abuelo llamó a mis padres. Cuando llegaron, me pusieron calcetines mejores y las botas de monte porque escurría agua, puesto que no paraba de llover. Ya retomado el camino, todo fue mucho peor, había barro por todas partes y no se podía pasar, pero al final llegamos a nuestro destino.

Subimos a la ermita a pesar de que era muy empinada y costosa. Luego fuimos a un mirador que se veía muy alto y bonito. Después comimos en el Asador "Candeque" y  regresamos a casa. 

Fue una jornada muy dura,  pero al final lo logramos y nos lo pasamos increíblemente genial. 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Una tarde de playa. De Arsen

UN DÍA DE VIAJE. POR ISRAEL

Las grutas de San José De Jesús